Verás…es algo así como abrir el libro que acabas de empezar apenas hace unos capítulos y leer el mismo trozo una y otra vez. Cuando consigues llegar por fin a esas líneas nuevas, algo te impide avanzar mucho más. Lo cierras y sigues con tu vida, pero no convencido del todo. Al rato-día-semana siguiente, vuelves a cogerlo, tus ojos se van otra vez al mismo párrafo y el proceso se repite. Y así unas cuantas veces hasta que, inexplicablemente, ya cambias de página y el párrafo ya no está y la lectura fluye como la seda. Devoras capítulos y capítulos sin darte apenas cuenta. Y hasta te diviertes haciéndolo.
Pues algo así ha sido mi vida estos días. Ahora me encuentro en esa fase de cambiar de página y empezar a «casi» devorar lo que hago. Me río a veces, desespero otras. Pero así es la vida en general y me alegra que así sea la mía en particular.
Hay días que río menos y apenas lloro. No es por falta de ganas, sino de tiempo.
Intento seguir buscando la felicidad continuamente y la superación de mi persona constantemente.
Mis hobbies se han convertido en eso, en hobbies, no en cosas que hacer por sobresaturación de nada.
Una especie de «rutina relativa» se va creando a mi alrededor.Carente de negatividad esta rutina; más bien….reconfortante.
Y por supuesto, los relatos y las palabras a escribir se van acumulando en mi cabeza a menudo. Mucho más a menudo. Pero siento que no es hora de plasmarlas. Que no estoy preparada…
Así que seguiré pasando páginas hasta encontrar el capítulo adecuado.
Hasta entonces….seguiré por aquí …verás…..