¿Vodka con risas enlatadas? No, gracias.


Anoche me dio por experimentar esta serie y no, no hubo química; más bien, mi laboratorio casi explota por la chocante voz de -y permítanme tal métafora ofensiva- aguardientosa de la protagonista. Aunque, bueno, no debería ser algo que me hubiera chocado, ya que (por lo menos en los 10 primeros minutos del piloto que aguanté a ver) solo piensa en Vodka, alcohol, tíos y chistes malos envueltos en risas enlatadas out of nowhere. No sabía que, al final, lo que pasó con Chelsea es que la cancelaron en marzo… No me extraña.

En fin, hay 12 capítulos, por si queréis echarle un vistazo a esta serie que me recuerda mucho muchísimo a la estética del bar de Cheers, pero… dejando mucho que desear. Lo único ¿bueno? es que podemos ver de nuevo al guapote rubio de Greek más maduro y en su vertiente más ¿graciosa?

En fin, ¿qué se yo con solo 10 minutos de nada, verdad? No es ironía pedante, es en serio…

Pero, bueno, aunque Chelsea rezase al mismísimo dios del Vodka pidiendo audiencia, esta no funcionó.

¿Será porque ni un dios hasta las trancas de vodka podría  tragarse esto?

Pero qué sabré yo de dioses borrachos, es que tengo unas cosas…

2 comentarios en “¿Vodka con risas enlatadas? No, gracias.

Deja un comentario